Nos ofrece a la vista un limpio y brillante color cereza. En la nariz, un intenso aroma floral y a fruta roja del bosque, ensambla con toques lácticos y vainillas propios de su breve paso por madera (150 días).
Vendimia seleccionada 5.000 kg/ha. A la entrada de la uva en la bodega, se tratan por separado las tres variedades Tinto Fino 80%, Cabernet Sauvignon 10% y Merlot 10% y después de una breve prefermentación en frío se inicia una fermentación alcohólica espontánea (sin adición de levaduras).
Durante el encubado, 22 días, se realizan remontados y bazuqueos diarios controlando densidad, temperatura y evolución de la población de levaduras. Al término de esta fermentación, se sangran los depósitos y se realiza la fermentación maloláctica. Esta fermentación se inicia sin adición de bacterias y se controla la temperatura a 20ºC durante un periodo de 24 días, controlando los índices de ácido málico y ácido láctico. Cuando el ácido málico está por debajo de 0,1 g/l se hace el trasiego separando las lías y sin filtrar ni clarificar, ni pasar por frío se lleva directamente el vino a las barricas. Durante cinco meses el vino reposa en barricas nuevas de Roble Francés, al cabo de este periodo, se lleva a depósito para homogeneizar, únicamente se filtra por placas (K700 - poro abierto) y se embotella. Nos ofrece a la vista un limpio y brillante color cereza. En la nariz, un intenso aroma floral y a fruta roja del bosque, ensambla con toques lácticos y vainillas propios de su breve paso por madera (150 días). El paso de boca resulta amplio, elegante, persistente y aterciopelado, sin perder la viveza de los grandes vinos jóvenes de la Ribera. Viñedo: Pago de los Capellanes, Pedrosa de Duero. Servicio: Descorchar y decantar una hora antes de su consumo a una temperatura de 16º-18º C